jueves, 24 de marzo de 2011

El día que conocí a Fuentes y que Fuentes conoció a Pearl Jam

Es curioso cuando tantas cosas se conjuntan en un mismo momento. De pronto lograr que tantas coordenadas de tiempo y espacio se relacionen es difícil de creer, pero puedo decir que llegan a pasar.

¡Toda una conjunción!

 Conocí la obra de Carlos Fuentes gracias a un libro viejo que mi Padre tuvo a bien comprarle a una de mis hermanas para su tarea. En esos entonces ya era un lector empedernido de todo lo que caía en mis manos, así que fue muy bien recibido el leer “Los días enmascarados” cuando llegó a mis manos. Eso y quedar enamorado de Chac Mool fue una sola cosa.

Sin embargo, el libro que definió mi gusto por su obra fue “La región más transparente”. Tanto por la historia como sentimentalmente, es un libro con mucho peso para mi, uno de mis grandes favoritos. Lo conocí gracias a una de esas personas que han marcado mi vida, curioso, porque lo buscamos en una feria del libro, y terminamos comprándolo en un puesto callejero de libros de viejo. Era una edición de bolsillo sencilla, pero que nos enamoró con una portada que mostraba una imagen de la ciudad de México en los cincuentas. Sobra decir que una vez que ella lo terminó me lo prestó a mí y que al terminarlo yo, el libro ya era parte fundamental de ese capítulo que nos tocó vivir juntos.

Por eso, cuando la asociación de academias de la lengua española decidió lanzar una edición especial del libro como parte de los festejos del cincuenta aniversario de la publicación, mi primera idea fue tenerlo en cuanto saliera. Y así fue, después de días y días de espera, al fin una pila de ellos formada muy mona frente a mí en la librería del péndulo de la Condesa, que es algo así como mi surtidora oficial.

Cuando me acerqué a elegir mi libro, tomé uno que ya estaba abierto, y que por una extraña razón vi que estaba rayoneada la primera página. En ese momento no caí en la cuenta. De hecho mi reacción fue dejarlo y tomar uno ejemplar cerrado. Justo en ese momento, uno de los trabajadores de la librería se me acercó corriendo buscando algo, vio el libro que momentos antes había tomado y se fue respirando muy tranquilo. Había tenido en mis manos un ejemplar autografiado por Carlos Fuentes y sin más así se me fue.

Por eso, cuando supe que Carlos Fuentes estaría firmando autógrafos, ya sabía que libro sería el que firmaría. Por eso sabía que tenía que dejar todo literalmente para salir corriendo al lugar donde sería todo esto. A pesar de los problemas clásicos de este tipo de eventos, mal organizado y con problemas a la hora de pasar, de repente me encontré a unos metros del culpable de dar sentido a uno de los episodios más memorables en mi vida.

Sin embargo, y como suele pasar también, todo el discurso acerca de cómo me había influido y choros similares se me esfumó justo en el momento de tenerlo enfrente y estrechar su mano. No recuerdo muy bien lo que le dije, pero si pude notar su sonrisa al ver mi nerviosismo al darle el libro. Y he aquí que quien rompió el hielo (por decirlo de alguna forma) fue Don Carlos. Mientras tomaba su pluma y buscaba una hoja donde garabatear, me miró y me hizo una pregunta que me dejó helado: ¿Qué es Vitalogy?

Los que me conocen saben de mi idolatría por Pearl Jam, y como buen fan de ellos llevé justo la playera con el nombre de uno de sus discos (el tercero, para ser precisos). Así que escuchar una pregunta sobre uno de mis grupos favoritos de boca de uno de los autores que más me han dejado su huella en mí fue como un choque de trenes en mi mente. Ya con una sonrisa le explique que era el nombre de un disco de rock de un grupo llamado Pearl Jam, a lo que él entre interesado y curioso solo me dedicó una sonrisa bastante particular. Envalentonado por eso fue que pude pedirle la foto que gracias a ese romper el hielo con él, me concedió.

Y así fue la conjunción de eventos que me hizo el día. Después de haber dejado ir un libro firmado por él, ese ejemplar que compre en su lugar fue firmado por el mismísimo Carlos Fuentes para mí mientras me hacía una pregunta sobre uno de mis discos favoritos de una de mis bandas fundamentales.

No se ustedes, pero si me hubieran dado a elegir el momento, no me hubiera quedado tan bien.

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